El Mercurio nos mata poco a poco
El Mercurio ha representado una Amenaza en Potencia, referido a la cantidad de cosas o comidas que lo contienen, poco a poco nos van matando explican especialistas.
Cabe destacar que la mayor fuente de Mercurio que puede absorber el Humano se encuentra en los Mariscos.
Aunque la comida extraída del Mar (Mariscos), no poseen el Mercurio desde su nacimiento, si lo absorben durante su crecimiento, la frecuencia y la cantidad que consumamos de esto, nos afectara.
Pero en que nos afecta el Mercurio, de acuerdo al Doctor Jorge Arturo de León, del Laboratorio de Farmacologia de la Facultad de Medicina de la UNAM, explica que las principales afecciones son: Puede disminuir las capacidades cognitivas y de pensamiento, la memoria, la atención, la adquisición del lenguaje, las habilidades motoras finas y las habilidades espaciales visuales.
En Estados Unidos, la Administración de Alimentos y Fármacos, y la Agencia de Protección Ambiental (FDA y EPA, por sus siglas en inglés), recomiendan abstenerse de consumir estos alimentos (Mariscos), durante el Embarazo, la Niñez y la Adolescencia, si es posible evitar comerlos a toda costa es Mejor.
Pero los Mariscos no son los únicos, pero afectan más directamente al Humano, los Focos Ahorradores, si bien consumen menos energía, y duran hasta 10 veces más que los Focos Incandescentes.
Se explica que: "Su ruptura puede dar como resultado una concentración local de vapor de mercurio superior a siete miligramos por metro cúbico", alerta Mario Yarto Ramírez, del Instituto Nacional de Ecología.
Los dentistas también se exponen a este elemento dañino, El 50% de la composición de las amalgamas dentales es de mercurio, pero tras su colocación se endurecen en 30 minutos.
Los más afectados son los dentistas porque los vapores se liberan más durante la aplicación y el retiro de las mismas.
Con todo, pequeñas cantidades se liberan lentamente en forma de vapor por la corrosión o al masticar.
Lo encontramos inclusive en el Aire
Por ejemplo, al romperse un termómetro, el mercurio que contiene inicia un silencioso y letal camino. Este metal pesado, líquido a temperatura ambiente, se volatiliza al entrar en contacto con el aire, formando vapores.
Se respira, puede atravesar la piel, penetra en los pulmones, pasa al torrente sanguíneo y después a todo el organismo.
Cuando se inhala en una cantidad considerable causa síntomas inmediatos y, si se respira a diario en dosis pequeñas, puede causar vómito, dificultad para respirar e inflamación en las encías.
Fuente | CNN
Fuente | CNN